Está bien! Pero con la luz apagada,
A oscuras; como el encuentro de dos extraños
Que se unirán por primera vez.

Dentro y por fuera,
Entre los lados y recovecos rózame!
Que tu piel desnuda deje su huella sobre mi piel,
Subida al encuentro me dejo llevar
Y tú que lo deseas me hundes un poco más
En el encuentro.

Locura; envoltura  del deseo prohibido,
Dejamos de lado el tabú indebido.
Cubriendo tú desnudes  mis miedos,
Escuchando el murmullo que desea más…
Es el comienzo de un  juego
Que los dos pactamos jugar.

Otra vez volví a creer

Y tus cálidos besos volvieron a mentir,

Cuánto vale sentir?

Si con cada rencuentro me hundo en el sueño de lo q nunca va a ser.

Otra vez volví a creer

Como cuando creer los ojos guiados por la razón,

Sin saber que el alma muchas veces guía con el corazón;

Engañando los sentidos

Y queriendo creer en lo que nunca va a ser.

Hoy volví a creer y sé que en nuestros crueles encuentros

Volveré a mentirme

Con la loca esperanza de creer que esta vez todo funcionara.

Ilusionando mi alma y cuerpo,

Cerrando los ojos a la realidad y

Proyectando un futuro que muere con cada beso que me das.

Crueles besos que me engañan,

Crueles son los labios que recorren lo que nunca desearon.

Crueles son esas miradas

Que se mesclan con mis deseos y me mienten

Dulcemente, tristemente, cruelmente.

Otra vez volví a creer y entre sombras de deseo,

Miedo a la realidad y esa loca esperanza que me tortura,

Caeré entre tus brazos a mentirme una vez más.



los ojos del mundo



Luciérnaga en la oscuridad


Niño que de la calle eres
(por que nadie te reclama)
... Pinta los atardeceres de esperanza,
que nadie vive sin un mañana.

Niño que inmerso sueñas
Con el pasado del cual escapas,
Despierta a la vida
(La cual no te abraza)
Y con tu tierna sonrisa
Contempla el universo;
Que mudo y consiente aguarda.
A que tus pasos lleguen
Donde tus manos te lleven,
Y por ese camino
(Que oscuro te extraña)
Fortalece tus desnudos pies.
Recuerda que nadie muere sin un mañana.

Niño que en triste situación aguardas,
Espera la luz de la luna,
Al cálido sol,
Que en algún lugar del mundo
Esta aquel que tarde
(Pero aun temprano)
Llegara con una esperanza.

Niño sigue a las luciérnagas
En la oscuridad,
Que al igual que ellas tú iluminas
Con tu sonrisa la noche.

No llores niño de la calle,
Que las lágrimas se funden con el agua,
Repasa uno a uno esos deseos
(Que tu interior guarda)
Y con calma y despacito
Te llegara ese abrazo
Deseado en el alma.
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